De dolores penitentes.
En una tarde de
dolores de los mil demonios y otros que pueda inventar.
Dentista:
¿Eres alérgico a algún medicamento?
Ella
cuestionó para no matar a su paciente a pesar de haberlo anestesiado hasta la
muerte.
Él perspicazmente, tratando de ligar y sin perder la elocuencia contestó.
Él perspicazmente, tratando de ligar y sin perder la elocuencia contestó.
Yo: Solamente al
amor...
Y el dolor siguió en
la muela, un dolor de mil demonios y otros más que se puedan inventar.
-
Poeta
Irracional.
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